VIDA DIARIA
Mientras el Presidente del vecino país del norte enfrenta acusaciones en medio de su campaña política en pos de su reelección, se le cae parte de su discurso más frecuente en contra de los migrantes.
Parte del muro fronterizo en Mexicali Baja California literalmente fue derribado, no por la mano del hombre o lo migrantes que quisieron derrumbarlo para hacer realidad su sueño americano, sino porque la naturaleza conspiró en contra de TRUMP y le tiró más de 25 metros de su “fortaleza”.
Vientos huracanados registrados el pasado 29 de enero que azotaron Tecate y Mexicali, en Baja California, fueron los causantes de la caída del muro.
En las redes sociales oriundos de Mexicali invitaban a la gente para organizarse y cruzar antes de que fuera reparado el muro, situación que no prospero pues rápidamente fue acordonado el lugar.
Seguramente los de las caravanas migrantes no se enteraron porque ni siquiera se acercaron, o quizá sí, pero ahí si se midieron pues saben que no pueden hacer con las autoridades policiacas gringas lo mismo que hicieron con las mexicanas.
Además, allá, si pasan como lo hicieron acá, como marabunta y violentamente si procederá como invasión y las autoridades están autorizadas a defender su territorio, no tendrían contemplaciones como las tienen en México con los de las caravanas migrantes que ahora resulta tienen más privilegios que los desplazados mexicanos.
Nuestros indígenas que son desplazados viven en la intemperie, no tienen ni que comer, nadie les escucha, mientras que a los de las caravanas se les montan albergues, pero bueno, tristemente como dijera la Nana GOYA, esa es otra historia.
El tema en esta ocasión es que uno de los objetivos más polémicos y de discurso diario de TRUMP, parte del muro de una de las fronteras con más cruces ilegales como lo es Baja California, se le cayó a DONALD.
Quién sabe si sea mensaje divino, de que así como se le cayó parte del muro se le puede caer su reelección pues los problemas con las demandas para juicio político que enfrenta no son poca cosa.
¿Quién armaría los cimientos de la construcción del muro?, quién sabe, quizá un enemigo político, pero si así de endeble esta la defensa del presidente por las acusaciones de sus adversarios o de fuerte y reforzada esta la campaña de TRUMP, sus oponentes pueden cantar victoria.