Los 133 cardenales de la Iglesia Católica no llegaron a un consenso y todavía se desconoce el nombre del nuevo Vicario de Cristo
La incertidumbre continúa en el Vaticano. La tercera votación del cónclave 2025 ha concluido sin acuerdo y esto se reflejó con la fumata negraque emergió de la chimenea de la Capilla Sixtinaa las 3:51 a.m. (hora del centro de México).
Los 133 cardenales electores, reunidos en estricto aislamiento, emitieron sus votos en busca de encontrar al próximo líder de la Iglesia Católica. Sin embargo, ninguno de los candidatos alcanzó los 89 votos requeridos para ser elegido como el Papa 267 de la historia.
La jornada comenzó con la primera ronda de votaciones del día, en la que los cardenales depositaron sus papeletas en la urna sagrada. Tras el conteo, los resultados fueron insuficientes para definir al sucesor de Francisco, lo que llevó a la quema de las papeletas con la mezcla de químicos percrolato de potasio, antraceno y azufre que generaron el característico humo negro.
Miles de fieles, congregados en la Plaza de San Pedro, observaron con expectativa la chimenea del Vaticano, esperando el ansiado humo blanco que anunciaría la elección del nuevo pontífice, pero la falta de consenso ha prolongado el proceso, lo que no es inusual en la historia de los cónclaves.
La tercera ronda de votaciones iniciará a las 8:00 a.m. (tiempo del centro de México), con la esperanza de que los cardenales logren un acuerdo. Si no se alcanza el consenso, la tercera fumata se podría observar alrededor a las 11:00 a.m., momento en el que nuevamente se sabrá si hay un nuevo Papa.
El cónclave seguirá con su ritmo de cuatro votaciones diarias, dos por la mañana y dos por la tarde, hasta que se logre la elección. En caso de que el proceso se extienda por varios días sin resultados, se podrían aplicar pausas para reflexión y oración.
La Iglesia Católica y el mundo entero permanecen atentos a cada señal que emana del Vaticano. La elección del nuevo Papamarcará el rumbo de la institución en los próximos años, y los cardenales continúan deliberando para encontrar al líder que guiará a más de mil millones de fieles.
INTRIGAS CARDENALICIAS
El secretismo envuelve este secular rito que se desarrolla a puerta cerrada en la Capilla Sixtina. Los “príncipes de la Iglesia” permanecen aislados e incomunicados, y juran guardar secreto sobre la elección.
Y es objeto de especulaciones sobre las “intrigas cardenalicias”, , que llevarán a la elección del líder espiritual de 1.400 millones de católicos en el mundo.
La Capilla Sixtina no será un espacio para discursos, debates y negociaciones. Los intercambios se darán durante las comidas o reuniones en la residencia Santa Marta y otras dependencias vaticanas.
El decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re, llamó el miércoles a los purpurados a “mantener la unidad de la Iglesia”, en un momento “difícil, complejo y convulso”.
Muestra de la solemnidad y complejidad de la elección, los cardenales escriben el nombre de su candidato, doblan su papeleta y la colocan en un plato de plata, ante el fresco del Juicio Final de Miguel Ángel.
Con información de AFP.