Redacción/LaExpresión
CIUDAD VICTORIA. —Aunque aclaró que el tema de la supervisión de los centros de rehabilitación para personas con adicciones, conocidos como anexos, compete a la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coepris), Rembrandt Reyes Nájera aseguró que más que cerrar en forma definitiva estos lugares, lo que se buscar es que estén bajo regulación.
Aunque no especificó el nombre del anexo, el titular de la Subsecretaría de Salud Pública, explicó que la intervención se realizó tras una verificación que permitió constatar diversas irregularidades.
“El centro fue clausurado temporalmente con el objetivo de que se subsanen las observaciones detectadas y se ajusten a los lineamientos establecidos por la normativa nacional en materia de atención a las adicciones”, dijo.
En ese contexto, reiteró que la regulación de estos espacios está vinculada con el área de Coepris, la cual es responsable de revisar las condiciones sanitarias y estructurales de los anexos.
Reyes Nájera también mencionó que próximamente se impartirá un curso de capacitación dirigido a todas las unidades que ofrecen este tipo de servicios: “Existe toda una normativa para aplicarla. Salud mental y adicciones participan con acciones técnicas y de capacitación para asegurar que las condiciones sanitarias sean las adecuadas”, añadió.
El funcionario enfatizó que se exige la presencia de profesionales en salud mental en estos centros, y que deben cumplir con criterios estrictos de tratamiento, acompañamiento y atención a los internos, pero también reconoció que todavía existen centros que operan sin estar debidamente registrados.
Sobre el número exacto de anexos en el estado, Reyes Nájera reconoció que no cuenta con la cifra precisa, pero admitió que “sí hacen falta más centros regulados”, asegurando que se trabaja para identificar y supervisar aquellos que aún no cumplen con los requisitos.
En cuanto al contenido del curso próximo a impartirse, explicó que se abordarán temas como organización interna, responsabilidades, requisitos de operación, y el uso correcto de medicamentos y tratamientos que se administran a los internos, “pretendemos que la evaluación médica que se realiza en estos lugares sea cada vez más profunda y completa”, finalizó.