Redacción/La Expresión
REYNOSA, Tamaulipas. —A una semana de haber sido plagiado en la carretera libre Monterrey–Reynosa, el enfermero del IMSS Pedro Antonio Lorenzo Martínez continúa en cama, con secuelas físicas producto de la violencia sufrida durante su cautiverio, según informaron ayer personas cercanas a su familia.
Pedro Antonio, de 48 años, fue interceptado el domingo 15 de junio cuando regresaba de Cadereyta rumbo a Reynosa, y fue liberado el viernes junto con tres mujeres retenidas en un hecho aparte, tras permanecer cinco días en manos de sus captores.
De acuerdo con testimonios, el enfermero fue golpeado durante su retención, y hasta este día aún no lograba ponerse de pie. Su condición médica requiere atención especializada, y su recuperación podría prolongarse.
En paralelo, se reportó que una de las mujeres secuestradas en el mismo tramo carretero —María de la Luz Lara, de 48 años— presentó complicaciones severas debido a su diabetes, por lo que se mantenía hospitalizada en Monterrey. “La iban a dar de alta a la medianoche, porque tenía el azúcar muy alta”, comentó una sobrina.
Las otras dos mujeres liberadas, Natalia Gisela Ramírez Nolasco, de 50 años, y su nuera Teresa Lizbeth Pérez Fuentes, de 26, fueron dadas de alta y ya se encuentran fuera de peligro.
Los cuatro regresaban a Reynosa cuando fueron privados de la libertad en distintos momentos del fin de semana. La alerta generada por estos casos motivó incluso una advertencia oficial del Gobierno de Estados Unidos, que elevó a nivel Cuatro la alerta de viaje por la carretera Monterrey–Reynosa, debido a la persistencia de secuestros y hechos violentos.
Autoridades mexicanas catearon tres ranchos en la zona de Los Ramones, como parte de la investigación por estas desapariciones, sin que hasta ahora se informe de personas detenidas.
