CENA DE NEGROS
Marco Antonio Vázquez Villanueva
Como en las películas de Hollywood o escenas de las cruentas guerras contra el terrorismo que se viven en Europa y medio oriente, un coche bomba explotó en Jerécuaro y otro más en Acámbaro, Guanajuato, hubo policías lesionados y, por supuesto, se puso en riesgo la vida de cientos de personas.
Igual, como en las películas de acción que tanta demanda tienen en las plataformas y el cine, se observa lo que ocurre en Michoacán que está muy cerca del terror, ni se diga Sinaloa u otros Estados de la República.
En todos esos casos, los coche bomba o los atentados diarios en muchas regiones de México, se presume han caído personas inocentes y lo que se ve es que los delincuentes no solo desean eliminar enemigos, también quieren asustar, seguir amedrentando a la población al exhibir como inútiles a las corporaciones policiacas y de seguridad que, se presume, nos protegen de esa clase de delitos.
Lo peor es que ni siquiera se les da el nombre que merecen esos actos que lastiman a la sociedad ya que no hay forma de justificarlos, digo, hasta cierto punto sería entendible, no deseables, los ajustes de cuentas entre delincuentes, los muertos en enfrentamientos porque son personas que saben a qué se dedican, tienen conciencia del riesgo, a veces están seguros de que no van a vivir mucho tiempo y que no van a tener paz porque su actividad no se los permitirá, pero la situación es diferente cuando se observan actos de terrorismo, eso son, terrorismo.
Nuestra realidad, este México no se puede reponer de la herencia prianista, ya son años sumergido en el terror al grado que los jóvenes tienen mucho tiempo escondidos, los padres con miedo y no es para menos, lo que ocurrió en Guanajuato nos deja cerca de estar peor que en Siria, Irak, Afganistán, o todos esos países donde el terrorismo y muerte se dan constantemente y los delincuentes matan de las formas más sofisticadas y de impacto que les es posible.
México, al observar estos actos, debe tener claro que es víctima del terrorismos que ha crecido por la incapacidad de los políticos, sobre todo de Diputados locales y federales que no han sabido luchar para que haya más presupuesto para prevenir el delito, no para contratar policías solamente sino para asegurarse que ningún acto de este tamaño quede impune, al tiempo que se garantice a los chavos una forma digna de ganar dinero, la oportunidad de desarrollar sus talentos, eso solo se hace mejorando los sistemas educativo y de salud, por eso se puede afirmar que los que determinan la forma de ejercer el presupuesto no hacen su chamba.
La presidenta Claudia Sheinbaum, para fortuna nuestra, sabe como reaccionar, comprende que combatir la violencia no se limita a enviar policías y más policías, soldados, marinos, y federales a los lugares de conflicto ya que eso de poco o nada sirvió en el pasado. En efecto, todo el tiempo ha hecho falta una estrategia integral para recuperar la paz, la seguridad y la tranquilidad en este México lindo y querido, el gobierno de Felipe Calderón y el de Peña Nieto se equivocaron en perseguir “objetivos prioritarios” sin entender que primero debe ser la gente, reducir la pobreza, aumentar las oportunidades, tener ocupados a los jóvenes con empleos o en la escuela, atender a los niños antes de que caigan en garras de los vicios y todo lo realizado hasta hoy no ha sido suficiente, también se debe decir.
Para precisar, debemos tener claro que la violencia no se acabará con más violencia, no es matando a los matones como se irán viendo resultados ya que la organización de estos grupos les permite seguir como si nada ocurriera cuando les eliminan a alguien, a la caída de uno de ellos otro lo suple y listo, por eso es claro que el asunto es más de fondo, la paz se conseguirá cuando se pueda combatir la corrupción, impunidad, reducir la pobreza, mejorar el sistema educativo de tal forma que este detecte cualquier problema y no solo se concrete a expulsar niños de sus aulas.
Otra vez nuestro país está en llamas, urge apagarlo y la primera medida debe ser que no queden impunes esos atentados con coches bomba porque puede alentar a normalizar esta clase de asesinatos que siempre dejan muchas víctimas colaterales e inocentes, exacto, urge un alto a la impunidad, un alto a la delincuencia antes de que se conviertan en terroristas de alta escuela y nadie pueda detenerlos…
ACÁ YA SE ENTENDIÓ, EL TEJÓN Y ACCIONES ALTERNAS PONEN A TAMAULIPAS EN OTRO NIVEL… Mire, más o menos lo que se plantea para lo solución de los problemas es atender todos los frentes y lo que pasó ayer en San Fernando lo puede ilustrar, el Gobernador Américo Villarreal en una gira de trabajo puso en marcha las brigadas “Transformado Tamaulipas”, acciones del DIF que encabeza la doctora María Santiago de Villarreal para atender la problemática social en todos sus ámbitos, desde atención médica, educativa, gestión de empleos, hasta otros problemas que desencadenaron la violencia o la mantuvieron sin freno muchos años en el Estado, en resumen, llevaron servicios y beneficios y luego de esa acción acudió a el complejo de seguridad El Tejón, es la otra parte de la estrategia de seguridad, fue a inaugurar esa obra de 6,779 metros cuadrados, como un símbolo del compromiso firme que este gobierno ha asumido con la protección y bienestar, se presume que, con esas instalaciones y su capacidad, por si solas, se mejorará las condiciones operativas de las fuerzas de seguridad.
Los dos actos pueden ser la respuesta a quienes se preguntan porque han disminuido las percepciones de inseguridad en Tamaulipas, existe una atención integral y eso lo dijo el gobernador, “”con la inauguración de El Tejón damos un mensaje claro: en Tamaulipas no escatimamos esfuerzos cuando se trata de garantizar la tranquilidad de nuestras familias. Esta obra es una muestra de la determinación de mi gobierno para enfrentar los desafíos de seguridad con inteligencia, coordinación y firmeza y avanzamos a una nueva etapa de prosperidad, donde el humanismo sigue siendo el centro de todo”.
Y eso es lo que le digo, acá ya se entendió el tema, esperemos que no le aflojen en ningún sentido, que los números los sigan respaldando porque finalmente los únicos beneficiados de ello somos nosotros, los de a pie…