VIDA DIARIA
Es prematuro hablar de alianzas o coaliciones políticas en estos momentos ya que será hasta final de año cuando se vea quien bailara con quien pero algo que se puede adelantar es que el PRI tratará de recuperarse juntándose con otro u otros, ya lo verán.
Por conveniencia o necesidad pero de que es casi un hecho de que tanto en el 2021 como en el 2022 el PRI vaya en alianza lo es.
Quizá hasta pensando alevosamente en el 2021 jueguen con un color y en el 2022 les cambian, pues pueden aplicar la sentencia popular de que “primero mis dientes y después mis parientes”, es decir, verán sus conveniencias.
Es un hecho que aún no saben con quién vayan coaligados en el Estado porque mucho dependerá de la línea que les marquen desde el CEN pero para el baile vamos, de que servirán y se servirán de otro partido lo harán.
Claro que eso no quiere decir que sean entreguistas, es sobrevivencia, quizá solo confirmen a los de MORENA que formaron el PRIAN o a los panistas que sus raíces están en el PRIMOR y el pueblo constate que con uno o con otro son iguales pero no les quedara de otra, en esta ocasión les tocará bailar al son que les toquen, o mejor dicho, con quien les garantice ganar posiciones.
Siendo realistas al PRI en estos momentos no le queda más que ir en coalición o alianza en el próximo proceso electoral, claro si es que quieren tener presencia para el 2022, si no quieren desaparecer.
En las condiciones que han dejado al PRI ir solos a una contienda electoral es demasiado arriesgado para los tricolores, cierto es que con la nueva dirigencia están aprendiendo a caminar, se ve que EDGAR MELHEM hace su mejor esfuerzo para armar los pedacitos que le dejaron y está logrando poner ese partido en movimiento, la muestra son sus encuentros con la militancia y estructura del tricolor en diferentes municipios pero seguramente hasta los priistas más viejos saben que solos y sin dinero no pueden llegar lejos, que si no van en alianza no podrán ni siquiera hacer una contienda digna en el próximo proceso electoral.
Menos si buena parte de sus experimentados operadores políticos ya emigraron, se enfundaron en otros colores y los que se quedaron no apostaran su resto, es decir no arriesgaran sus patrimonios en causas perdidas.
En fin, la situación es que aunque hasta los mismos priistas se nieguen a creerlo y digan que no harán coaliciones con nadie en las próximas elecciones, panistas y morenitas aseguran que sí, que el PRI si hará alianza.
Para desfortuna de los tricolores sus hoy adversarios políticos son los que tienen la sartén por el mango, por lo tanto, como dijera CORLEONE, les harán una oferta que no podrán rechazar.